¡Hoy es Sábado! Pero lo importante de este día es que es mi cumpleaños. He estado planeando esto por semanas, así que tiene que salir bien. Por lo menos eso quiero creer.
Debo darme prisa para alcanzar buena carne. Ya aparté el primer cartón de chelas y cuento con las mesas y las sillas. Mi camarada, el Thunder, va a traer el segundo cartón y con eso comenzaremos la fiesta. Mi tía, la experta en la cocina y la que tiene el mejor sazón de la familia me ayudará a preparar la carne asada. Nunca había organizado mi propia fiesta y me siento emocionado. Parece que todo saldrá a pedir de boca...
Bajé la computadora de mi cuarto y la conecté al estéreo de la sala. Una lista de mis rolas favoritas y otra de videos. No quiero que se aburran mis invitados. ¡Cómo me voy a divertir!
Vaya... ¡Cuánta gente! Creo que tardaré un poco en regresar a limpiar la cochera para la party.
Llamada de mi madre: "¿Dónde diablos andas? ¡Tienes que limpiar la cochera! ¿Ya compraste la carne? ¡Es tardísimo!"
-Si, madre. Voy de regreso...
Son las doce y no han llegado los cartones. Ni la hielera. Ni las mesas. Ni las sillas...
¡Uf! Llegaron. Ya me había preocupado.
Llamada de mi novia: "Llegaré un poco tarde."
-Mmm... Ok. No hay problema.
¡Que rico huele! Parece que, después de todo, si saldrá bien este asunto. Ha llegado mi familia... Con todos sus hijos, menos el de atrás.
Caray. Adiós música favorita. Todos quieren ver el partido así que apagan el estéreo y encienden la televisión. Bueno, tal vez no sea tan malo...
Vinieron mis compañeros de trabajo... ¡Excelente! ¿Alguien iba a traer dos botellas de tequila? ¿No? ¿Para eso compré el Squirt y los limones?
Diablos, que complicado es esto de ser anfitrión. No he podido probar bocado. ¿Otra chela? Ahorita te la traigo. ¿Clara, verdad? ¿Era oscura? Perdón... ¿Tu plato, verdad? Sin ensalada, ¿cierto?
Para mi mismo: "¿No podrían dejar en el plato simplemente lo que no quieran? Complican mi chamba de chef, mesero, barman, garrotero..."
-¿Vas a comer? Me gritan mientras esquivo a mis sobrinos que corren por la sala y estan a punto de... Maldición. Adiós colección de figuritas de Star Wars... de cristal.
-No gracias. Esperaré un poco más...
¡Llegó ella! ¡Genial! La esperaba para comer juntos. Hola hermo... ¡Que cara! Parece que trajera un zorrillo muerto de tres días en ese bolso...
-Disculpa, ¿te pasa algo? ¿Te sirvo de comer?
-No es nada. Y no tengo hambre.
Sigo asando, sirviendo, rebanando, recogiendo, llevando, mezclando, corriendo... Pero no puedo concentrarme. ¿Hice algo? No lo recuerdo. Me hubiera gustado que llegara sonriendo. Después de todo, es mi cumpleaños, ¿no? Por poco tiro una chela. Eso si sería pecado.
Se me quitó todo: la sonrisa, la energía, las ganas, el optimismo... y el hambre.
Al final, mi mejor amigo no vino, mi mejor amiga no vino, porque iba a venir mi novia y no quería incomodarla. Ah, ¿recuerdan la cara de enojada de mi chica? Resultó que soñó que la engañaba con una vieja zorra y por eso llegó encabronada. ¡Un pinche sueño! Me lo contó cuando fui a llevarla a su casa. Son las 12 de la noche y no he comido. Mucho menos cenado. Y aunque no lo crean, no he probado alcohol. Gracias.
Así que tomo una decisión: Nunca más celebraré mi propio cumpleaños...
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Me acaban de llamar mis cuates. Los infaltables. Los fieles. Los incansables. Vienen en camino. Uno de ellos viajó desde la ciudad de México.
Y en la hielera sigue un cartón de chelas tan frío como una pata de pingüino. Por fin un oasis de tranquilidad. Comemos lo que queda de la carne asada con las manos, los cubiertos no son parte de nuestros rituales. Ellos son el tipo de amigos que si quieren una cerveza, la toman de la hielera. Si se acaban van por más. Si decimos una pendejada, no perdonan. Se burlan sin compasión. Nos burlamos sin compasión: Somos amigos.
Llegaron 12 horas tarde, eso si. Pero llegaron. No saben como se los agradezco.
¡Salud!
Un momento, yo porqué no fui requerida? (O es la del año pasado? O antepasado? Ya no me acuerdo)
ResponderEliminarJajaja... recuerda que es ficción ;)
ResponderEliminarY si fuiste requerida. Fue cuando me di cuenta que si te gustaba la carne. Y dejaste de ser la niña verdura :P
Las cosas pudieron ser peor , te podría haber cortado en tu cumpleaños como le paso a al amigo de un amigo.
ResponderEliminaro podrías cumplir 40 y tener que ir a tu examen de prostata
http://blogdemanteka.blogspot.com/2007/12/el-amigo-de-un-amigo_05.html
Tienes razón, manteka. Las cosas siempre pueden haber sido peor. Al final la borrachera con los puros cuates valió por todo lo malo...
ResponderEliminar¡Salud!